Cuando al punto final no le siguen dos puntos suspensivos


8:31 p.m
11/04/2016
“Cuando al punto final no le siguen dos puntos suspensivos” J.S

Siempre creí que esto sería una de esas historias para contar toda la vida porque no terminan nunca y sin embargo me he encontrado en esta grieta justo ahora de golpe contra la pared, como si me volviera ciega de repente. Quiero creer tantas cosas pero mentirme no hace falta, solo puedo aferrarme a lo que queda, si es que algo queda y sonreír porque pasó, aunque me hiera. Cuando el dolor mental se vuelve físico, se te apretuja el corazón. Tengo tantos recuerdos que quisiera apilar uno junto al otro y botar en el arroyo de las porquerías. De nada me sirven en la cabeza porque solo me lastiman.

Día #1 el descubrimiento
soy feliz porque he encontrado a una persona irrepetiblemente ideal para mí. Celebro la tecnología, celebro el encuentro y la maravilla de tus letras en mi pantalla. Todo lo increíble que podía suceder sucedió y para mi fortuna vas a quedarte un buen tiempo a mi lado lejano y cercano. Porque no importa donde estés yo te busco te encuentro y finalmente te adoro.

Día #20 Somos risas y versos
qué es este sentimiento repentino tan profundo y real?  Soy feliz y siento que floto entre tulipanes. Siento que tengo mucha suerte de habernos encontrado y que voy a mandar todo lo demás al carajo porque ya nada más es importante para mí, has eclipsado todos mis atardeceres, porque eres quien llena los vacíos de mi corazón.

Día # 365 Sólo podemos ser amigos
mis sentimientos han cambiado de manera radical y pienso que para bien, me libro de mis amores no correspondidos y vuelvo a la cruda realidad donde ya no me amas porque nunca lo hiciste. Y de repente todo regresa a la normalidad, como si hubiera estado en una piscina de lodo, atrapada y sola, ciega y estúpida. Te he comenzado a odiar, a odiar lo que amé con fervor y locura, puedo ahora despojarme a retazos de lo que quede de este amor, pero quiero transformarlo en la más pura y tierna amistad. ¿Podré?

Día  #719 el final
En 11 días serán dos años ya, todo empezó de colores y ahora es solo matices de gris. Nos volvimos perros y solo vemos en blanco y negro. Las cosas se destruyeron, todos los puentes que construimos se quebraron y es que nunca fuimos muy dados a la ingeniería. Sin embargo, lo intentamos como el albañil fiel y honrado. Pero no sabíamos lo que hacíamos y jugamos a enmendar las goteras aunque nunca dejó de llovernos. Caen una tras otras las tejas de este techo que se pudre desde que fue construido. Ya no podemos sostenerlo más porque ya rueda por el suelo, el agua nos inundó los espacios. Estoy sacando con un balde el agua pero sigue entrando, ya me cansé y me rendí. Tú nunca sacaste el agua, ni reparaste la gotera a ti nunca te importó ver caer todo lo que había, tú solo lo dejaste pasar.

Ya no importa si es un día o dos o tres. Los que sean se han acumulado y ya no hacen más que pesar. Extraño cómo comenzó todo, como éramos pero ya eso se perdió y no puedo ir tras de ti y encontrarte esperándome con los brazos abiertos y extendidos hacia mí. No quiero admitirlo porque guardo esperanzas escondidas pero son basuritas apestando, en realidad ya no me queda nada. Cierro los ojos y lloro, lloro porque este es el final que nunca creí llegaría. Algo se derrumbó dentro de mí y no quedó ni un ladrillito en el cimiento. Es hora de abortar la misión, la tripulación ha fallado y regresa con una mano por delante y otra detrás, cabizbajos todos lloran en silencio. Todo lo que he hecho por ti y por mí fue un entero despilfarro.

Y es que a esta historia no le quedan más puntos suspensivos.
9:50 pm 



Comentarios

Entradas populares